Publicado 31-10-2017
KEPA GÓMEZ Y FRAN CASQUERO EN EL MARATÓN DE AMSTERDAM
El viernes
13 de Octubre pusimos rumbo al Maratón de Ámsterdam, desde Bilbao, en vuelo
directo, mi compañero de fatigas (y hermano)
Fran Casquero, y yo mismo, Kepa Gómez. Íbamos dispuestos a afrontar nuestro
séptimo maratón y con unos objetivos realmente ambiciosos.
Llegamos a Ámsterdam y nos está esperando el traslado, que nos lleva al Hotel Manor. Situado a diez minutos, en tranvía, del centro de la ciudad, que es la Plaza Dam, donde se encuentra el Palacio Real y un montón de atracciones para el turista.
El hotel está muy bien equipado, es moderno y limpio. Situado en un barrio muy tranquilo y al lado de un parque muy grande en el que salir a trotar (nuestro sueño!!!)
También hay
que decir que tiene dos paradas de tranvía a 100 metros, con lo cual la
posibilidad de movernos es muy sencilla y amplia. Recomendaría, si os animáis a
ir, sacar la tarjeta de transporte por 3 días. Cuesta 17€ y te puedes mover por
toda la red de transporte (tranvía, metro y autobús). Desde el hotel a la Feria
del Corredor hemos tardado una media hora, así que todo correcto.
El viernes y
el sábado, nos dedicamos a callejear un
poco por la Plaza Dam, Rembrandt, y Barrio
Rojo. Enseguida te das cuenta que es una ciudad con mucho turismo, y en muchos
aspectos, pensada para ello. Muy segura, sin ningún problema y sin prisas, para
nada. También muy plana!!!
El sábado por la mañana estuvimos en la Feria del Corredor. La catalogaría de normal, si tenemos en cuenta que es un Maratón "Gold". Hay de todo, pero quizás un poco pequeña para un maratón de esta envergadura. Aún así, salimos muy contentos y con ganas de empezar el lio!!!
Sábado tarde
y noche, nuestro habitual ritual de comidas, descanso y preparación del
material para el día "D".
Domingo 15:
día del Maratón. Salimos pronto del hotel sobre las 07:45 de la mañana, porque ese día no funciona el tranvía (por el
maratón) y hay que ir en metro que está a unos 15 minutos caminando desde el
hotel, pero es muy muy sencillo (hay que ir hasta la estación de WIBAUSTRAAT
y allí coger la línea 51 hasta la estación de ZUID. Cambio a la línea 50
hasta la estación AMSTELVEENSEWEG, que es donde está el Estadio Olímpico). En
total, desde que sales del hotel al estadio, unos 45 minutos. Aconsejo ir con tiempo porque
el metro va lleno.
La salida del Maratón es a las 09:30 y se sale del ESTADIO OLIMPICO, lo cual es una pasada. La temperatura es de 14 grados, demasiada alta para lo que suele ser usual aquí en esta época y se espera que lleguemos hasta los 20 grados. Día soleado y perfecto para correr. La salida está bien organizada y salimos a la hora prevista en dirección a nuestro sueño. Atravesamos el centro de Ámsterdam durante los primeros 10 kilómetros y a partir del 12, aproximadamente, te sacan a la zona del rio Ámstel, que quizás es un poco desangelada porque hay menos gente y sopla un poquito el viento. De todas maneras, hay que decir que es precioso correr al lado del rio. Llegamos al kilómetro 22, punto en el que se vuelve a entrar a la ciudad y otra vez la animación vuelve a aparecer. Es el momento en que te dedicas a correr y que pasen los kilómetros. Cuando te quieres dar cuenta estas entrando en el Estadio Olímpico. Una pasada, como ya dije.
Entro en la
línea de meta con lágrimas en los ojos ( a mí siempre me pasa y ojala nunca
deje de pasarme !!!) porque en un maratón hay momentos en los que piensas que
esto se complica y cuando llegas es un subidón tremendo.
Cuando
acabamos, nos dedicamos a mirar a las gradas del Estadio Olímpico de Ámsterdam,
para fijar en nuestras retinas y corazones, unas gradas llenas de gente aplaudiendo que es
una sensación única que nunca había vivido en mis anteriores maratones.
Luego ya a
la tarde, y el lunes, lo dedicamos a visitar algún museo por Ámsterdam y
recuperar con alguna de sus buenas cervezas. Lunes, a las 11 de la noche, llegada a Bilbao y hasta la próxima.
Tengo que
decir que la atención de César Corral, de Running Travel, ha sido, como siempre
estupenda. De 10 no, de 20. Siempre pendiente de nosotros y te lo pone todo a
huevo. Solo te tienes que preocupar de correr. Por eso, es la cuarta vez que
viajamos con Running Travel ( Florencia, Berlín, Paris y Ámsterdam). Y seguiremos
viajando, porque creo que ya no es solo quien nos proporciona los viajes, sino
un gran amigo que nos alegramos haber conocido.
PD: Tened
cuidado en Ámsterdam con las bicis. .No estamos acostumbrados a ellas y en
algunos momentos pueden pasarte por encima porque hay un montón...
Muchas gracias de parte de Fran y Kepa